El “Malón de la Paz”, la primera marcha de las comunidades Coyas y Guaraníes data de entre mayo y agosto de 1946, en la que Hermogenes, un líder carismático puneño que junto a un centenar de mujeres y hombres de las comunidades originarias arrancaron a pie desde Jujuy a Buenos Aires. Iban en busca de ser atendidos por el presidente Juan Domingo Perón, por aquel entonces un joven Coronel que había llegado por elecciones libres a la presidencia de la Nación. Siendo estas épocas de oportunidades y teniendo en cuenta que en campaña Perón había hablado de expropiar tierras a los terratenientes, emprendieron la marcha a pie por las rutas de la Patria en busca de Perón para recibir en mano los tan añorados títulos de sus tierras.
Lo concreto es que viajaron por más de dos meses. Cuando llegaron, Perón las/os recibió con la característica sonrisa del viejo león herbívoro. Después, a los y las peregrinas las/os alojaron en el hotel “Los inmigrantes” en el puerto de Buenos Aires y a la mañana siguiente cayó el ejército, los subieron a un tren y mandaron nuevamente a la provincia.
Ciertamente, en esa oportunidad, Perón no entregó títulos a las comunidades. Aunque hay que decir que, en 1948, en los albores de una nueva constitución se ampliarían derechos y oportunidades para todas y todos. Perón expropió a terratenientes y finalmente les entregó los títulos a Hermogenes y demás comunitarios.
Obviamente, con el posterior golpe de “la fusiladora” la constitución de 1949 fue anulada y las tierras quedaron en manos del fisco. Esta acción, finalmente, es lo que posibilitó hasta hoy que estas comunidades permanezcan en sus territorios y no fueran desalojadas por los terratenientes.
60 años después un segundo “Malón por la Paz” caminó un día y medio desde los distintos departamentos de la provincia de Jujuy hacia Purmamarca y exigió que el gobernador peronista Eduardo Fellner, acate un reciente fallo de la Justicia que lo obligó a entregar 1,5 millón de hectáreas a Coyas y Guaraníes. Además decidieron, en asamblea, el corte total por tiempo indeterminado de las rutas nacionales 9 y 16, hasta que el gobernador se preste a dialogar.
Hoy, 17 años después, un tercer “Malón por la paz”, llegó desde lo profundo de la patria a la ciudad autónoma de Buenos Aires para marchar el 7 de agosto a San Cayetano conjuntamente con las organizaciones sociales. Reclamaron que se intervenga la Provincia de Jujuy por la represión, persecución y encarcelamiento macrista que tomó por rehenes a las comunidades.
Exigieron los títulos de las tierras y al Congreso que sancione una Ley por el “Derecho a la propiedad comunitaria indígena”, por derecho al acceso al agua, en defensa del medio ambiente, por el derecho a la vida y el de las mujeres que son quienes mayoritariamente militan, participan y se responsabilizan de todos los temas en las comunidades.
Por Cristian Tauil
Para Palabra Activa
