Por Ana Bragaccini
Hablamos con Stella y nos cuenta:
.- Vivo en Hurlingham. En esta etapa me identifico como poeta. Comencé en la infancia, muy estimulada por mi padre. Nos había regalado un libro de poesía para niñas y niños que leía y memorizaba con fascinación. Luego el pendular de la vida hizo que callara durante años. Volví a escribir al fallecer mi esposo, con la guía de Marilí Sostres, coordinadora del Taller Literario. Y publiqué mi primer poemario: “TRAVESÍAS” con todo el peso del duelo.
¿Cómo nace tu segundo libro?
.- En aquellos meses de cuidado por la pandemia del Covid se gestó el deseo de recopilar textos para construir mi segundo poemario. Lo titulé “A TRAVÉS DEL UMBRAL”, por las temáticas referidas, por una parte a lo interior, sentimientos y sensaciones intimistas, sin ser confesional, y por otro lado a lo que sucede puertas afuera, la conflictiva social, la pobreza, la discriminación, el colectivo trans, el drama de las y los refugiados.
¿Cómo fue y es el camino del libro?
.- Se cumplió en junio un año de su presentación, con personas amigas y conocidas en mi hogar. Fui invitada a presentarlo en la Feria Latinoamericana del Libro en la Universidad Pública de Cartagena de Indias, Colombia. Fue una impensada y preciosa experiencia. Luego lo presenté en la Biblioteca Pública de Chacras de Coria, Mendoza. Hoy viaja virtualmente de mano en mano.
Le hacemos la pregunta medular: ¿Por qué escribís?
.- Siento que la escritura ayuda a destejer aquellas situaciones conflictivas que se agazapan y quedan allí sin cicatrizar. Al escribir llevo también la voz de mis ancestras impresa en mis células.
Se detiene en un momento muy largo como buscando en la historia y agrega:
.- Está presente también la palabra de tantas escritoras que he leído, las que tuvieron que firmar como varones, las que tuvieron que fajar sus pechos para ser escuchadas.
Y cierra con la transparencia de las poetas.
.- Pero sobre todo porque escribir sana y cierra heridas.
Desamparo
Una plaza la iglesia escalinata
un negro sobretodo cubre al viejo
se atardecen sus huesos deshilados
hay memoria de escombros y tragedia
un perro vagabundo husmea los cartones
las palmas de las manos extendidas
como ofreciendo migas a los pájaros
todo el cielo en sus ojos al buscarlos.
Hay un ir y venir, gente que pasa
alguno se detiene y sigue su camino
desprecio en las miradas y en el gesto.
La oscuridad diluye sus contornos
recorta el campanario un resplandor de luna
él siente la tibieza del perro en sus zapatos.
Padvalskis, Stella Maris, Hurlingham, Buenos Aires, Argentina.
Participó en varios talleres literarios. Obtuvo 2º premio de S.A.D.E. (Sociedad Argentina de escritoras y escritores) Santa Fe de Poesía, en 2019. Recibió varias menciones en Certámenes del Instituto Cultural Latinoamericano en 2020, 2022, 2023. Publicó dos poemarios: Travesías (2018) y A través del umbral (2023). En junio de 2024 la editorial Avis Nigra seleccionó dos de sus poemas para la antología “Memoria del tiempo”.