El año pasado, un grupo de vecines de Hurlingham comenzaron a organizarse para realizar una bicicleteada al mes para visibilizar la necesidad que tienen les ciclistas de una infraestructura segura y adecuada en la Av. Vergara.
En principio, el recorrido de la caravana de bicicletas comenzaba en Cinco Esquinas y culminaba en Carrefour. Luego mutó e inició en Plaza Urquiza (William Morris) para luego pasar por la Plaza Granaderos (Villa Club), el Concejo Deliberante, la Municipalidad y finalizaba en el Centro Cultural Marechal.
A mediados de 2021 y en septiembre de este año, lograron acceder a la Secretaría de la Intendencia, la cual sufrió los cambios pertinentes por el intercambio de intendentes. A pesar del enroque, ambas secretarías acordaron analizar y hacer un relevamiento del tema.
Este año, con la colaboración de los miembros del grupo, se redactó un proyecto de ordenanza, el cual fue presentado en la Mesa de Entrada del Concejo Deliberante. Esta iniciativa se sumó a los distintos petitorios que se fueron presentando en las Intendencias de Hurlingham y Morón durante estos casi dos años.
Piedra angular
Ariel es un bicicletero, inventor, actor y soñador que tuvo la idea de organizar una bicicleteada a partir de un accidente que hubo en Av. Vergara, aunque siempre pensó que la disposición de la avenida debería ser de otra manera. Publicó su intención en las redes sociales y convocó a varies amigues por Whatsapp. Nunca pensó que su proyecto iba a tener tanta repercusión. “Se formó un lindo grupo de gente y es el mayor capital que tenemos”, relató Ariel a Palabra Activa.
El grupo que se consolidó a partir del pedido de bicisendas, afirma que la sustentabilidad es fundamental para el futuro el cual hay que comenzar a pensarlo hoy. “El rol de la bici para descomprimir el tránsito y poder hacer que la gente circule de forma sana y segura es imbatible en todo el mundo. Y más con el avance que hay de los patines y las bicicletas eléctricas que te permiten circular muchos kilómetros. El auto es un lujo”, agrega Ariel.
Asimismo, destacó que él no podría haber llevado adelante la iniciativa de una bicisenda en el distrito sin la ayuda de les vecines, que aportaron con diversas tareas troncales para dar visibilidad al proyecto. “El relevamiento técnico y de dibujo con autocad, toma de medidas, que hicieron Fede Álvarez, con la colaboración de Virginia, Maru, el Taller de Alejo, La Cortada, los medios zonales que dieron su apoyo, Omar, que hace serigrafía y donó remeras y parches. No podría haber hecho nada de todo esto sin toda la gente que hizo por motu propio. Casi que no quiero ni figurar”, concluyó Ariel.
¿Será que es posible convertir esta quimera en realidad en los pagos bonaerenses? Una vez más, el empuje vecinal parece tener la respuesta.
Mar Buonomo
Para Palabra Activa
Bicicleteada en Hurlingham – @bicisendasenhurlingham
Presentación del proyecto de ordenanza en el Concejo Deliberante – @bicisendasenhurlingham
